
Tiene una superficie mayor que la de grandes ciudades como Valencia, una sirena la simboliza y rinde homenaje a generaciones de agricultores que la han desarrollado y alimentado a su población.
Algunas de estas características configuran la descripción de Villanueva de la Serena, municipio que supera los 25.000 habitantes y se encuentra enclavado en la provincia de Badajoz, a unos 200 kilómetros de Ciudad Real.
Qué visitar en Villanueva de la Serena

La visita a Villanueva de la Serena puede enfocarse desde el punto de vista ancestral. Para ello el paseo se
iniciaría, por ejemplo, en la avenida Ramón y Cajal, la peatonal para recorrerla y captar el pulso
social desde el monumento a sus agricultores, que consiste en sendas figuras de burro con capazos o
serenos (apelativo popular de los habitantes de Villanueva) y labrador. Seguiría en el denominado Palacio Consistorial La Jabonera, con sus exposiciones de vestimenta de diferentes épocas.
Este último también se incluiría en un recorrido desde la perspectiva patrimonial, que podría
presidirlo el propio ayuntamiento, un edificio que conserva un arco original del siglo XVI,
cuando servía de cárcel, audiencia y almacén de trigo. Muy cerca se sitúa la iglesia de Nuestra
Señora de la Asunción, de arquitectura herreriana reedificada en 1808.

Cerca de la casa consistorial igualmente se hallan la capilla del Santo Sepulcro, constituida por
el histórico Concejo de la Mesta o el Palacio Prioral Monasterio de San Benito, con un extenso
pasado iniciado a finales del siglo XV por el último maestre de la Orden de Alcántara, Juan de
Zúñiga y Pimentel, y que ha alojado a eruditos como Antonio de Nebrija.
Desde una óptica más demográfica, el eje urbanístico más concurrido va desde las vías del tren
a la amplia circunvalación por la avenida de la Hispanidad, con su vertiente industrial y su
recinto ferial y, sobre todo, a la arteria que conforman la céntrica avenida Ramón y Cajal y sus
prolongaciones de la calla San Francisco y Chile, para desembocar en la ampliación natural del
municipio por el espacio de institutos y zona deportiva. En esta última destaca un coqueto
parque con lago y chorro incorporado, y por el que pasean a su libre albedrío ocas y patos.
La «carrerita» del Domingo de Resurrección
Y si vamos a la vertiente paisajística, la citada línea férrea da paso a una bifurcación
reconvertida en vía verde de paseo que supera los 50 kilómetros. Para andar sin ir tan lejos sus
habitantes utilizando la avenida del canal o se desplazan en peregrinación hasta la ermita de La
Aurora, ubicada cerca del campo de golf, a unos cinco kilómetros del casco urbano. Su amplia
explanada permite celebrar algunos de sus bailes y fiestas tradicionales y da pie a la afamada
‘carrerita’, fiesta de interés turístico regional que desarrolla el Domingo de Resurrección.
El pueblo donde surgió la popular tortilla de patatas
En este recorrido de Villanueva de la Serena desde diferentes puntos de vista no podemos olvidar el
gastronómico, con dulces típicos como pestiños o bollas de anís, además de sus churros, pan
candeal y, desde luego, sus quesos y embutidos, con la presidencia, en este elenco, de la
tortilla de patatas, cuyo primer documento escrito data de 1798 con origen, precisamente, en
esta localidad de la provincia de Badajoz. Precisamente por ello cada año lleva a cabo un
campeonato para dirimir cuál es el mejor restaurante de Extremadura en elaborar la clásica
tapa española.
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